Cartero sufre infarto al ver felicitación navideña
D. Pedro Ridruejo momento antes de sufrir el grave percance.
Pedro Ridruejo, cartero madrileño adscrito al servicio de Correos de España desde hace treinta años fue ingresado ayer de urgencia en el Hospital Clínico San Carlos aquejado de un fuerte dolor en el pecho que resultó ser un infarto. El equipo médico pudo salvarle la vida in extremis pero costó trabajo.
El desencadenante del infarto sufrido por este laborioso cartero parece ser que fue la visión "horrible" según califica él mismo, de un tarjetón de felicitación navideño, según explico el aún convaleciente cartero, hacía muchos años que no veía algo tan horroroso.
El presidente del sindicato de carteros españoles ha declarado a Minuto News que "la gente debería de tener más cuidado enviando estas porquerías, hace muchos muchos años que no tenemos costumbre de ver estas cosas y nos llevamos cada susto de muerte".
Al parecer la postal navideña que el Sr. Pedro Ridruejo tuvo en sus manos era verdaderamente horrible, según explica el jefe del equipo médico "consistía en una tarjeta doble, de unos 20x15 centímetros aproximadamente, al desplegarla se te aparecía un Santa Claus, un Portal de Belén con Reyes Magos y todo y un pequeño espacio para escribir, todo ello además lleno de colorines. Hasta a nosotros nos costó trabajo resistir la visión, de hecho una auxiliar de enfermería y un técnico sanitario tuvieron que ser asistidos de sendos shocks producidos por el estres".
Los servicios médicos no comprenden como estas tarjetas no van obligatoriamente en sobre cerrado y con alguna advertencia, al parecer hay gente mayor que está acostumbrada y las siguen enviando pero la gente joven no está preparada para esto y sufre diversas dolencias ante su simple visión. El Dr. Carlos Maderuelo, jefe de cardiología del Clínico San Carlos se pregunta por qué las felicitaciones navideñas no vienen con algún tipo de advertencia similar a las de las cajetillas de tabaco "Por e-mail o whatsaap resistes estas cosas porque primero lo ves en pequeñito y ya por las fechas te imaginas que es alguna barbaridad de este tipo, pero que un profesional abra la saca de correos, y se encuentre algo así entre cartas de bancos y seguros puede ser realmente peligroso".
